Terapia Gestalt (Infancia / Adolescencia)

El enfoque Gestalt enfatiza la visión del niño/adolescente como un ser creativo en constante crecimiento y capaz de guiar conscientemente su comportamiento desarrollando su máximo potencial para satisfacer sus necesidades como un ser único e irrepetible. [+]

El servicio consiste en:

  • Observación y valoración del niño/a en el que se han detectado señales de alerta.
  • Valoración de las dificultades que presentan y toma de decisiones: derivación a especialista, orientaciones para el trabajo en el aula, orientaciones a familia, etc.
  • Reunión con la familia (si fuera necesario).
  • Seguimiento de caso (si fuera necesario).
La etapa de los 0-6 años es un momento clave para la detección de dificultades en el desarrollo. Una intervención temprana puede ser clave para la evolución positiva de los síntomas.
El enfoque Gestalt enfatiza la visión del niño/adolescente como un ser creativo en constante crecimiento y capaz de guiar conscientemente su comportamiento desarrollando su máximo potencial para satisfacer sus necesidades como un ser único e irrepetible.

Este enfoque psicoterapéutico humanista se centra en la experiencia presente, la conciencia (awareness), la responsabilidad personal y la autorregulación organísmica. Aplicada a la infancia y adolescencia, se adapta a las necesidades evolutivas, emocionales y relacionales propias de estas etapas, priorizando el vínculo terapéutico, el juego como vía de expresión simbólica y el desarrollo de la conciencia emocional y corporal.

Según Violet Oaklander (2001), este enfoque facilita que los menores fortalezcan su sentido del yo, integren sus emociones y desarrollen recursos para afrontar las dificultades desde una base segura. La autora destaca el uso de herramientas proyectivas como el dibujo, el juego dramático, la arena o el modelado, que permiten acceder al mundo interno del niño respetando su lenguaje simbólico y su ritmo.

“El objetivo del proceso terapéutico es ayudar al niño a recuperar la conexión consigo mismo, con sus sentimientos y su potencial, en un entorno que valida su experiencia” (Oaklander, Hidden Treasure, 2006).

La Terapia Gestalt considera a la persona como un todo en relación con su entorno. Claudio Naranjo (1990) subraya la importancia del contacto auténtico y la conciencia del aquí y ahora como vías de transformación, lo cual resulta especialmente valioso en el trabajo con adolescentes que atraviesan procesos de búsqueda de identidad y pertenencia.